Los movimientos al incrementar su intensidad, aceleran por presión-tensión, la salida del cuerpo energético, al desplazar el punto de encaje del cuerpo físico hacia el energético.
Los primeros ocho movimientos básicos son para la parte inferior del cuerpo. Sus nombres coinciden lo más posible con los nombres de los ejercicios usados actualmente en el deporte del fisicoculturismo.
Los primeros ocho movimientos básicos son para la parte inferior del cuerpo. Sus nombres coinciden lo más posible con los nombres de los ejercicios usados actualmente en el deporte del fisicoculturismo.
1. Contracciones de pantorrilla de pie.
2. Contracciones de pantorrilla, sentado.
3. Contracciones de corvas, acostado.
4. Contracciones a una corva de pie.
5. Sentadillas profundas alternadas con jalones de tórax acostado.
6. Extensiones de muslos, sentado.
7. Prensas de muslos, sentado.
8. Levantamientos de rodillas, colgado.
Tres veces de quince, doce y ocho repeticiones.
Los ocho movimientos básicos para la parte posterior son igualmente traducidos lo más fielmente posible con los que practican en la actualidad los fisicoculturistas. Aunque distan mucho de producir el efecto de flujo y reflujo en el torrente sanguíneo que producen las alteras y los aparatos de los perceptores primigenios.
1. Dominadas en barra horizontal.
2. Jalones de tórax acostado con barra.
3. Remo inclinado con barra.
4. Levantamientos de peso muerto.
5. Encogimientos de hombros con barra.
6. Levantamientos laterales inclinado.
7. Extensiones de tríceps con barra acostado.
8. Prensas en banco con agarre angosto.
Tres veces de quince, doce y ocho repeticiones.
De preferencia trabajar el primer ejercicio seis veces de diez a doce repeticiones alternando el agarre de las manos. Los remos se pueden alternar con agarre amplio, medio y corto.
Los ocho movimientos básicos para la parte frontal del cuerpo se hacen tres veces de doce, diez y ocho repeticiones y también se han traducido al fisicoculturismo.
Los ocho movimientos básicos para la parte frontal del cuerpo se hacen tres veces de doce, diez y ocho repeticiones y también se han traducido al fisicoculturismo.
1. Fondos en barras paralelas.
2. Jalones de tórax acostado a través del banco.
3. Prensas en banco con barra.
4. Prensas con barra de pie.
5. Levantamientos laterales de pie.
6. Contracciones de bíceps de pie con barra.
7. Contracciones de bíceps a una mano en banco.
8. Contracciones de muñeca con barra.
Al finalizar los ocho movimientos respectivos, ponerse de pie, levantar al frente los brazos semiflexionados, estirar un brazo a la vez, girándolo hacia la parte opuesta, como si se lanzara un gancho lateral frontal a la altura de los hombros, con las manos apuñadas, manteniendo la cabeza y las piernas fijas. Este movimiento descompresiona la espina dorsal y los hombros, dejando el cuerpo relajado y fluente energéticamente.
Existe toda una tradición relacionada con el desarrollo y mantenimiento óptimo de las esferas interiores en el linaje de los guardianes protectores del nahual pentagonal, muy larga de enumerar, así como de la ingestión de alimentos tan vital para los desplazamientos y cambios del punto de encaje. El cuerpo físico en particular funciona molecularmente con energía perceptora, donde cada reacción químico-eléctrica debe concordar con la siguiente y con la anterior. El flujo de energía fluye al estar los canales bioenergéticos abiertos. Es una cuestión programática y no estética o atlética. Estas dos últimas se dan por sí mismas como ganancias adicionales. En la segunda atención un cuerpo debilitado o descuidado tiende a fraccionarse y a desintegrarse por falta de cohesión y de control. Un cuerpo fuerte al desintegrarse mantiene el control para integrarse nuevamente en otra atención.
Contenido extraído del libro "El nahual de cinco puntas" Autor: Domingo Delgado Solórzano.
Existe toda una tradición relacionada con el desarrollo y mantenimiento óptimo de las esferas interiores en el linaje de los guardianes protectores del nahual pentagonal, muy larga de enumerar, así como de la ingestión de alimentos tan vital para los desplazamientos y cambios del punto de encaje. El cuerpo físico en particular funciona molecularmente con energía perceptora, donde cada reacción químico-eléctrica debe concordar con la siguiente y con la anterior. El flujo de energía fluye al estar los canales bioenergéticos abiertos. Es una cuestión programática y no estética o atlética. Estas dos últimas se dan por sí mismas como ganancias adicionales. En la segunda atención un cuerpo debilitado o descuidado tiende a fraccionarse y a desintegrarse por falta de cohesión y de control. Un cuerpo fuerte al desintegrarse mantiene el control para integrarse nuevamente en otra atención.
Contenido extraído del libro "El nahual de cinco puntas" Autor: Domingo Delgado Solórzano.